

El que alguna vez fue el edificio más alto y moderno de Chile fue testigo de una tragedia incendiaria que dejó como víctimas a 11 personas entre las que se incluye un bombero. Los trabajadores y visitantes dicen que desde entonces en el lugar se experimentan sucesos paranormales que incluyen sombras y fantasmas de las víctimas, las cuales incluso pedirían ayuda y conversarían con la gente.




La torre se ubica en la zona norte de Providencia, Santiago, en las faldas del cerro San Cristóbal y a un costado del río Mapocho. La Torre es considerada uno de los edificios icónicos de la ciudad de Santiago de Chile, tanto por ser un símbolo del progreso de la economía chilena de los años 80 como por el trágico incendio que ocurrió un año después de su inauguración y que redefinió las normativas del país para la construcción en altura.
El diseño de la torre Santa María, fue inspirado simbólica y formalmente en las Torres Gemelas del World Trade Center en Nueva York, y tenía como fin convertirse en un emblema de la prosperidad del país, impulsada por el crecimiento de la economía durante la década de los ochenta. En consecuencia, fue el primer rascacielos de Chile y su edificio más alto durante 14 años, con 29 pisos y 110 metros de altura.
El Incendio del 21 de Marzo de 1981
Como complemento a los innovadores sistemas de seguridad incorporados al edificio, el personal de las oficinas que utilizaba el inmueble de lunes a viernes había sido instruido adecuadamente respecto del plan de acción a ejecutar en caso de que ocurriese una emergencia; no así el grupo de trabajadores externos que se encontraba realizando las terminaciones del piso 12 durante el fin de semana de la tragedia. Tampoco sabían cómo utilizar las modernas vías de escape, y de hecho, ese día las escaleras presurizadas estaban abiertas de par en par, por lo cual resultaron inútiles.
Ocurrió un día sábado, a eso de las diez de la mañana. El grupo de trabajadores instalaba las alfombras de lo que sería el Estudio Jurídico de Santiago Montt Vicuña, utilizando, como era normal en la época, un adhesivo altamente tóxico, inflamable y volátil. Puesto que no se había ventilado adecuadamente, la nube de gases flotante permaneció al interior de las habitaciones, y cuando uno de los obreros prendió un cigarrillo en el lugar, se produjo una explosión.
Las llamas se propagaron rápidamente, y en dos minutos ya habían cubierto todo el nivel, acabando con la vida de dos personas. Otras siete murieron producto del calor y la intoxicación, atrapadas en los ascensores que utilizaban para escapar pero que, lamentablemente, quedaron trabados. Y en uno de los episodios más dramáticos y recordados del incendio, transmitido el mismo día por la televisión local, dos personas se lanzarían al vacío, muriendo al estrellarse contra el piso, dejando un saldo total de once personas muertas.
Historia
Hoy, a más de 36 años de esa tragedia, trabajadores y ocupantes del edificio aseguran que, desde entonces, las almas en pena de algunas de las 11 víctimas fatales del incendio siguen deambulando por algunas dependencias de la Torre Santa María. No sólo se oyen extraños ruidos y gritos en pasillos, oficinas y ascensores, sino que también se divisan, especialmente en la noche, inexplicables sombras y siluetas fantasmales que recorren el fatídico piso 12. Es el caso, por ejemplo, de los dos instaladores de alfombras que murieron quemados, los cuales han sido descritos por testigos como dos personajes vestidos y peinados al estilo de los años 80s.
Algunos oficinistas que suelen enfilar por el pasillo que lleva a los ascensores, han relatado también que frente a sus ojos se materializa un bombero perfectamente equipado y que aborda el ascensor en el piso 12. En otras ocasiones, algunos visitantes del edificio (que jamás han oído hablar de él) lo han visto en el ascensor y le han pedido que detenga el ascensor para también subir a él, pero, al abordarlo, el bombero ha desaparecido. Este fantasma, por cierto, ha sido asociado a Eduardo Rivas Melo, el bombero de la 13 Compañía de Bomberos de Santiago que falleció sofocado en aquel incendio. También, en el mismo piso 12 o en los pisos inmediatamente superiores e inferiores, a veces se detecta un inconfundible olor a humo, sin que exista el más mínimo rastro de fuego en el lugar.
La Torre Santa María es el típico lugar que, según los expertos, quedó “cargado” con energías negativas muy fuertes producto de la tragedia del incendio de 1981. Por ello, se cree que algunas de las personas que fallecieron en ese lugar todavía permanecen en el edificio, como si no supieran que ya están muertos. Incluso existen algunos registros y grabaciones que dan cuenta de la existencia de estas presencias fantasmales”, explicó Freddy Alexis, investigador de fenómenos paranormales. Alexis agrega que “conversando con uno de los funcionarios del edificio que todos los días usa el montacargas, el ascensor que en teoría se usa las 24 horas del día, me relató que una noche iba completamente solo en ese ascensor cuando le pareció escuchar la voz de varias personas y el grito de alguien que le dijo claramente la palabra “Ayúdame”.
El jefe de los conserjes de la misma Torre Santa María cuenta también que una vez cuatro personas del personal de aseo, que todos los días entran al edificio por el sector del subterráneo, se subieron al ascensor con un bombero, el mismo bombero que después desapareció inexplicablemente ante sus ojos.
Actividad Paranormal
Cómo llegar
La Torre Santa María se encuentra ubicada en la avenida Los Conquistadores #1700, Providencia, Santiago, Región Metropolitana, a unas cuadras del metro Manuel Montt.